Orizaba, Ver.- La integrante del Grupo Multisectorial en VIH- Sida, Patricia Ponce Jiménez consideró que ya es momento que la Secretaría de Salud federal y estatal diseñen una estrategia para la atención a los pacientes con VIH SIDA, pues por la pandemia, los olvidaron y se encuentran en rezago de atención hospitalaria.

Y es que expuso que desde hace año y medio que llegó la pandemia de COVID-19, la política de atención de la Secretaría de Salud es sólo dar medicinas y no revisar de manera oportuna para detectar cómo va el estado de salud de las personas que tienen este padecimiento.

En esta situación se encuentran unos 12 mil pacientes con VIH SIDA quienes están vulnerables a morir por presentar un grave deterioro en su salud.

“Al principio la política fue para evitar las aglomeraciones, contagios y que se expusieran, darles sus medicamentos cada tres meses y así solo se moverían poco en el año, pero insisto: esto ya se sostuvo a lo largo del tiempo. La pandemia del COVID-19 sigue y no se modifica la política de atención integral, ni se modifica el tema de la prevención”.

Reveló que la Secretaría de Salud dispuso de médicos de los Capasits para la atención hospitalaria de coronavirus y otros más para aplicar la vacuna por lo cual el personal en los CAPASITS se redujo.

Además, que durante un año no se hicieron los estudios de carga viral y CD4, que requieren las personas cada tres o seis meses. “Esos estudios son importantes porque detecta la cantidad de virus que tienes en tu sangre y a partir de eso es que se les da X o Y tipo de medicamentos. Entonces se les tienen que hacer los estudios para saber si el medicamento está cumpliendo su papel, porque cada organismo es diferente, pero al no haber esos estudios se le sigue dando la medicina, pero no sabemos si está siendo efectivo y no sabemos los niveles de indetectabilidad”.

Todo esto traerá consigo el aumento en casos de SIDA y VIH, aumento de la mortalidad, nacimientos de más niños y niñas con VIH, y un deterioro generalizado en las personas afectadas por el virus, vaticinó la activista.