*Cordura en salud
*Feminicidios impunes
*Rondan temblores
Históricamente y salvo los escenarios heroicos de la lucha por la independencia de México y la Revolución, la bella ciudad de Querétaro se ha distinguido como una de las regiones más apacibles en tierras mexicanas, preñada de historia y con una población amable y confiable, características que favorecen su imagen y que le ha permitido fortalecer su desarrollo integral, por lo que muchas son las familias que provenientes de otros puntos de la República, se han asentado en esa bella área, convirtiéndose en una de las regiones mexicanas favoritas y no sólo para mexicanos, sino para familias provenientes de otros países.
Es por tales características que las espantosas escenas registradas al interior del estadio de futbol de la ciudad de Querétaro, imágenes terroríficas que están dando la vuelta al mundo, que generan escalofríos a los televidentes, así como en quienes las registran en sus redes de Internet por conducto de computadoras o teléfonos celulares, difundidas tanto en todo México, como en todos los pueblos del globo terráqueo, panorama criminal que habrá de causar un daño de efectos prolongados a nuestro país, auto agregándonos otro lado obscuro de nuestro comportamiento, reflejando que no somos una región del todo apropiada para que nos visiten y, mucho menos para que arriben a nuestros entornos inversiones del exterior.
Lo registrado en el estadio queretano, agregado a los hechos de terrorífica violencia originado en tierras nacionales en los ámbitos del crimen organizado, brindan a nuestro país la clara imagen de una tierra de barbarie, escenarios que por sí mismo desalentarán aún en mayores niveles, el que inversionistas de otros países piensen en instalar nuevas empresas en tierras mexicanas, fuentes laborales que requerimos incluso con niveles de emergencia.
Y de la misma forma ése lado violento de nuestra conducta, induce a que empresarios mexicanos pierdan interés por generar mayores inversiones, sabedores que la inseguridad en todo núcleo social no es un tema sencillo de resolver, tanto así que en lugar de disminuir, con recurrencia se expande incluso con mayores efectos destructivos, lo que por razón natural deja de entusiasmar a inversionistas y ya no se diga a los turistas, porque simple y llanamente en cualquier parte del mundo, países de diversos continentes (muchos de ellos con mayores niveles de seguridad) siempre estarán abiertos para recibir a inversionistas creadores de fuentes de trabajo, así como a turistas, dado que ello les aportará un mayor desarrollo integral.
El pasado sábado, nuestro país volvió a ejecutar pasos hacia atrás, desgastando aún más su imagen frente al mundo, refiriendo a una sociedad infiltrada por el terrorismo delincuencial, así como un Gobierno ajeno a la eficacia en materia de seguridad, agregando a ello el que tales agresiones, en parte, son el resultado de la doctrina de confrontación que el propio Gobierno ejerce en el marco nacional, desde el inicio del día en los espacios identificados como “las mañaneras” mismos en los que con recurrencia se siembra la doctrina del distanciamiento, e incluso del rompimiento entre “fifís y chairos” lo que en lugar de beneficiar al país, otorga reforzamiento a la generación de mayores núcleos virulentos, quienes cual si fueran pelotones de combatientes nacionalistas, que combaten por nuevo un país de transformación, cometen tropelías de elevada criminalidad, mismas que no sólo representan actos deleznables y por lo mismo delictivos, sino que al mismo tiempo desgastan tanto al Gobierno que nos rige, como a la imagen de nuestro país en lo general…
Peores escenarios podrían presentarse, si se persiste en las prácticas de confrontación entre los unos y los otros desde las esferas gubernamentales.
Lo que se lee
Claro que abrir las puertas para que todo mexicano tenga derecho a la salud, constituye una acción que corresponde al gobierno ejecutar, pero no deja de ser fundadamente preocupante el que tales metas en tierras mexicanas, se busque alcanzarlas “concentrando” sobre todo en el Instituto Mexicano del Seguro Social, la solución a las carencias o limitantes de hospitales públicos, haciendo hacia un lado que el IMSS fue creado para que con aportaciones del trabajador y empresas, se cubra lo referente a los programas de salud y bienestar establecidos para los afiliados, mismos que obligadamente deben ser registrados por las empresas que los contratan, tanto así que “para los no afiliados” operan los hospitales conocidos como públicos.
Si los centros de asistencia médica públicos (en los que no se debe incluir al IMSS) resultan obsoletos o insuficientes para atender a todo mexicano que no está afiliado al IMSS, entonces la obligación de quienes nos gobiernan es construir nuevos y suficientes centros hospitalarios para el servicio público en lo general, pero “no copar” las clínicas del IMSS, en las cuales los trabajadores afiliados aportan conjuntamente con sus fuentes de trabajo, para disponer “ineludiblemente” de la atención inmediata y apropiada ante afectaciones en su salud (paralelamente a los programas de jubilación).
El IMSS y sus servicios deben de ser suficientes y eficientes para cumplir con la atención en beneficio de los trabajadores afiliados, al igual que debería registrarse las mismas características en rubros semejantes como el del ISSTE, escenarios que deben ser mejorados permanentemente de acuerdo a los requerimientos tecnológicos y disponibilidades de espacio, así como al número apropiado en relación al personal médico, mientras las instituciones de salud para el servicio del público en lo general, deberán de la misma forma ser eficientes y suficientes para la atención de quienes los reclamen.
Debe quedar puntualmente definido que se trata de lograr eficacia en los dos rublos, no de invadir áreas o servicios médicos desde hace décadas instituidos para fines específicos, lo que podría resultar inconveniente para lo que fueron creados y, con ello, generar problemas mayores a los que se intentan resolver…
No siempre es aconsejable arrojar todo a la misma canasta, por ello es urgente ampliar y crear mayores espacios de atención en hospitales públicos mexicanos.
Lo que se ve
Está claro (los hechos así lo confirman) que los programas oficiales con los que se intenta reducir los escenarios de violencia contra mujeres, constituyen un real fracaso en los últimos tres años, apuntes negativos que de acuerdo a mujeres activistas, pueden confirmarse plenamente ante la realidad de los hechos.
Quienes forman parte del núcleo de mujeres que reclaman a las autoridades restaurar la tranquilidad, lo que equivale a frenar la violencia contra las mujeres tanto en tierras veracruzanas como en todo el país, han mostrado clara constancia que dichas metas no se han logrado en más de tres años de la actual administración veracruzana, espacio en el que incluso las autoridades federales tampoco han obtenido resultados positivos, por lo que se puede concluir que en ése renglón el Gobierno de la República y de las entidades del país, son acreedores a un rotundo fracaso.
Lo que se oye
Ante los repetitivos temblores registrados en áreas relativamente cercanas a tierras veracruzanas, en tanto que se han suscitado en la región de Istmo, debemos mantenernos con cierto nivel de alerta ante los breves (pero notorios) sacudimiento telúricos en últimas fechas, dado que de acuerdo a la experiencia de expertos en ése renglón, es factible que tales fenómenos telúricos pudieran repetirse con mayores dimensiones, hecho que obviamente podría causar daños superiores… Más vale el mantenernos pendientes para poder (en lo posible) actuar de acuerdo a las circunstancias…
Ahí la dejamos y disfrute de un excelente inicio de semana.