*Conspiran contra el INE
*Acarreos “espontáneos”
*Vacuna para pequeños
Uno de los temas mayormente preocupantes que priva entre los mexicanos (en algunas regiones más que en otras) es el vinculado con el elevado nivel de peligrosidad que se registra (cada día con mayores dimensiones) en las carreteras de nuestro territorio nacional, escenarios de terror que en lugar de registrar tendencias hacia la baja, está reflejando una mayor intensidad, tanto en lo relativo a cifras, como en lo referente a niveles de agresividad que colocan en alto riesgo la vida de los viajeros.
En los escenarios de referencia se marca que los actos delincuenciales en las carreteras del país, enmarcan hechos en los que las víctimas con frecuencia son integrantes de una familia, por lo que ante la amenaza de disparos contra los menores, el conductor se ve obligado a deteners, lo que origina en principio un “estado de total indefensión” a lo que se suman rangos de “elevado terrorismo” suma de agravios que constituyen un agregado de mayor dramatismo a los aberrantes escenarios.
Entre las carreteras de mayores riesgos por la frecuencia de asaltos en el país, la calificada por las autoridades como la más peligrosa en todo México, como resultado de la actividad criminal, es el tramo identificado como “La Esperanza” que forma parte de la carretera entre Puebla y Córdoba, calificación que nuevamente coloca a tierras veracruzanas entre las más peligrosas del territorio nacional.
Pero lo más lamentable de tales referencias estriba en que, dichos niveles de peligrosidad motivados por la actividad delincuencial, no son nuevos, no son actividades de criminales que se pudieran calificar como recientes, sino que los habitantes de la región central veracruzana tienen claro, que la vía de comunicación en referencia ha registrado elevada actividad delincuencial desde tiempo atrás, tanto así que dichos escenarios forma parte de una prolongada historia periodística, a lo que incluso se agregan accidentes fatales, originados por conductores aterrorizados al ser perseguidos por asaltantes que reflejan elevados niveles de criminalidad.
Durante décadas Las familias de los municipios de esa región (que son muchos) así como conductores de todo el país que circulan por dicho “tramo de criminales” han elevado el reclamo de instaurar permanentemente programas de vigilancia en el área de referencia, ya calificada como la de mayor criminalidad entre las carreteras mexicanas, pero los escenarios y el panorama no ha variado ni un ápice, al tiempo que el terror sigue imperando.
La historia ya otorga referencia hacia la irresponsable actitud y nula aptitud por parte las autoridades estatales y federales, que han reflejado su indiferencia a un problema que, por décadas, ha originado no sólo asaltos, vejaciones y asesinatos, sino que ha dañado la tranquilidad de quienes habitan en los entornos de dicha vía de comunicación, área que está calificada como “región sin ley” y obviamente sin seguridad, en la que los viajeros (miles de familias con sus pequeños hijos) se encuentran expuestos al terror de las violencia ya institucionalizada en dicho tramo, que es el más importantes entre el centro del país y el sureste del territorio mexicano… Vale insistir:
¿Intervendrá al Gobernador veracruzano Cuitláhuac García Jiménez, para conjuntamente con el gobernador de Puebla y las autoridades federales, encontrar una vía que convierta en seguro el tramo más terrorífico de nuestras vías de comunicación dominado por la delincuencia?… Por sus hechos los conoceréis.
Lo que se lee
Está claro y los hechos así lo atestiguan, que el actual Gobierno auto promulgado como transformador, ha sostenido insistentemente una campaña para desgastar el prestigio del Instituto Nacional Electoral, mismo organismo que hace cuatro años acreditó precisamente el triunfo electoral del Presidente que ahora lo descalifica, escenario semejante que también se registra en el Congreso del país, con legisladores que también fueron reconocidos por el INE como triunfadores, actitud descalificadora que por sí misma asombra a los historiadores y a los analistas de la vida pública mexicana y del exterior.
Obviamente el acoso gubernamental contra la institución electoral, cuya credibilidad es superior a la de los funcionarios públicos, referirá en la historia del país una acción insospechada, que al unísono siembra sospechas que hacen presumir en ámbitos de la actividad política, la maquinada ejecución de campañas de descredito en contra del INE, con la idea de opacar su prestigiada acción, que permitiera desbancar al actual Consejo General del INE, para introducir nuevos elementos acordes a los intereses de quienes precisamente hoy desgastan su imagen… De ser así la historia dictaminará el castigo midiendo con la misma vara.
Lo que se ve
Sobre las manifestaciones de respaldo hacia funcionarios públicos como el apenas registrado en tierras veracruzanas, de siempre o… para referir con claridad y agradable ritmo: “Toda la vida”… Los actos masivos de respaldo a políticos, sobre todo si ya son poderosos funcionarios, constituyen el reflejo de expertos operadores, regularmente con amplia experiencia en dichos escenarios, por lo que resulta ocioso que quien recibe las ovaciones, refiera “que fue una agradable sorpresa” el que la ciudadanía “se volcara espontáneamente” en sus entornos para rendirle pleitesía.
El apunte resulta oportuno para agregar que, en Veracruz, de lo poco que se hace sin preparativos fríamente calculados es bailar el jarabe loco y, eso, cuando no fue programado con anticipación para los festejos carnavalescos, por lo que atinado resultaría que en la Capital del Estado de los jarochos, no se diga que se concentran manifestantes en respaldo a quien gobierna, sin haber sido convocados por una figura superior, indicaciones que con frecuencia se ejecutan desde las sombras que originan las cortinas palaciegas… Bien dicen que el chimpancé no era arisco, sino que así lo volvieron los golpes que da la vida.
Lo que se oye
Tiempo tiene que nuestros vecinos del norte muy cerquita de nuestras fronteras, han estado vacunando en los marcos de protección frente a la pandemia, a los pequeños de cinco años de edad, lo que generó que muchos mexicanos trasladaran a sus hijos de ésa edad (y para arriba) para que fueran inmunizados ante la amenaza pandémica.
Saludamos con gusto que el Gobierno de México inicie procesos de vacunación para niños de cinco años o más, lo mejor hubiera sido que se hubiese tomado tal medida aparejados con la decisión estadunidense, porque con ello hubiéramos ejecutado un significativo adelanto en beneficio de nuestros pequeños, pero ciertamente más vale retardados que nunca.