ANIVERSARIO 212 DEL GRITO

DE LA INDEPENDENCIA DE MÉXICO

Paso 28 años encarcelado por haber sido conspirador.  A sus 32 años, Epigmenio Gonzalez es un próspero comerciante de Querétaro, propietario de un taller, fabricaba las astas para las lanzas y con un trabajador cohetero manufactura cerca de unos dos mil cartuchos.

Cuando la conspiración fue descubierta su nombre fue de los primeros en salir a la luz.  El 15 de septiembre aguaciles del Virrey      registraron su        taller    y encontraron evidencia: largos palos con haz,          dos escopetas, dos espadas, una lanza, y un hombre rellenando cartuchos de pólvora.

Antes de ser detenido Epigmenio González le dio tiempo enviar mensaje a los conspiradores de Guanajuato. A jalones los gendarmes se lo llevaron a encarcelar, por dignidad no denuncio a nadie. Fue condenado a trabajos forzados en el fuerte de San Diego en acapulco, enfermo debido a las malas condiciones de su encierro.  De pronto fue deportado a Manila donde siguió su régimen carcelario.

La consumación de la Independencia Iturbide y su alianza con Guerrero se llevó a cabo el 27 de septiembre de 1821 y Epigmenio seguía en prisión en la cárcel. 

Epigmenio fue liberado hasta 1836 cuando se firmó la propuesta de paz con España; había pasado 27 años en cárceles Imperiales.

La liberación de Epigmenio le resulto tan terrible como la cárcel, sin dinero, enfermo como pudo se trasladó de Manila, hacía España y posteriormente a México. 

Contaba con 28 años cuando al fin llegó a Querétaro, de sus viejas amistades y de los conspiradores originales nadie ya existía, ni sus parientes.

Epigmenio Luchador Idealista, se acercó al nuevo Gobierno en 1838, ante el presidente Antonio López de Santa Anna y le preguntaron ¿Y usted quién es? Y Epigmenio González respondió con carácter y orgullo “Yo soy uno de los padres de la patria, el primer armero del movimiento insurgente” y le dijeron, no está usted equivocado, en la lista oficial esta: Miguel Hidalgo y Costilla, Ignacio Allende, Juan José Marcos Gaspar Antonio de Aldama y González, José María Teclo Morelos y Pavón, Josefa Ortiz de Domínguez…para ser padre de la patria hay que morir de manera gloriosa y estar en la lista oficial.

Usted no está en la lista.

La Historia de Epigmenio González, la narro él mismo en el diario “La Revolución” en 1855.

Fuente bibliográfica:

Taibo II, Paco Ignacio. El cura Hidalgo y sus amigos. Sep/Libros del rincón de lectura México. Editorial Zeta.2007.

Trueba Lara, José Luis. Hidalgo la otra Historia. Editorial Diana. México. 2021.

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