Tequila, Ver. – Finalmente, Lorenzo Ayohua Ramos el joven originario de la comunidad de Tepecuitlapa, cuyo sueño americano fue segado por un fatal accidente de tránsito en Washington, D.C., regresó la noche de este lunes a su tierra natal para ser velado y sepultado entre los suyos.
La repatriación de sus restos, culminada tras más de 60 días de esfuerzos, marca el desenlace de una lucha familiar contra reloj, sumada a la solidaridad comunitaria y el apoyo institucional del ayuntamiento de Tequila.
La odisea logística y administrativa inició tras la noticia del deceso de Lorenzo, quien perdió la vida de manera instantánea al ser atropellado por una camioneta. Frente a los elevados costos y la complejidad del proceso, la familia hizo un llamado público a la ayuda económica, abriendo una cuenta para donativos que permitieran financiar el traslado.
Ante este escenario, la administración del presidente municipal Jesús Valencia Morales activó los mecanismos de apoyo correspondientes, gestionando ante la Secretaría de Relaciones Exteriores y el consulado mexicano en Estados Unidos toda la documentación necesaria para autorizar el retorno.
Gracias a estas gestiones, el cuerpo de Ayohua Ramos fue enviado al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y, desde ahí, trasladado por una funeraria contratada por el municipio hasta Tepecuitlapa, donde una multitud congregada lo recibió con una sentida ceremonia comunitaria.
Entre rezos, cantos serranos y el llanto de sus padres, esposa e hijos, Lorenzo fue recibido con la amargura de una partida temprana, pero también con el consuelo de un último reencuentro en su tierra.
Sus restos serán inhumados en el panteón municipal de Tequila, en una ceremonia que incorporará rituales indígenas de la región, poniendo fin a un viaje de ida y vuelta que nadie esperaba.