*Pequeños empresarios enfrentan un cierre de año complicado y un 2026 pesimista
Orizaba, Ver.- El 2025 ha sido un año complicado para los pequeños y microempresarios de la región, y las perspectivas para 2026 no pintan mejor, advirtió Luis Cruz Montesinos, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) Orizaba-Córdoba.
En entrevista, Cruz Montesinos reconoció que, aunque los empresarios apoyan el incremento salarial y las reformas laborales, los efectos sobre las microempresas han sido significativos. “No estamos en contra de que los trabajadores ganen más, pero estas medidas aumentan las prestaciones y las obligaciones, como aguinaldo, prima vacacional, seguridad social e Infonavit, que terminan afectando directamente a los pequeños empresarios”, explicó.
El dirigente señaló que, mientras los grandes corporativos pueden absorber estos incrementos, los negocios pequeños enfrentan un desbalance financiero: los costos suben, pero las ventas se mantienen estables. Esto genera que muchos se vean obligados a reducir ganancias, ajustar su plantilla o incluso migrar a la economía informal.
“Este año fue difícil, y el próximo se ve pesimista”, resumió Cruz Montesinos. El líder empresarial destacó que, a pesar del esfuerzo de los microempresarios por mantener empleo y productividad, la falta de apoyos financieros o incentivos limita la capacidad de crecer o cubrir los nuevos costos.
Propuso que se consideren tasas preferenciales y programas de apoyo, sin regalar recursos, pero que permitan aliviar la carga a quienes generan la base económica del país.
Además, advirtió que la presión económica está impulsando la automatización: algunas empresas están sustituyendo personal por tecnología, desde cajas de autoservicio hasta sistemas de atención automatizada, como una estrategia para reducir costos ante la creciente carga laboral y financiera.
El panorama, afirmó, refleja una creciente vulnerabilidad de los micro y pequeños empresarios, quienes a pesar de su esfuerzo y compromiso enfrentan un entorno cada vez más competitivo y con mayores obligaciones fiscales y laborales. La informalidad sigue creciendo, y la preocupación es que, sin medidas de apoyo, la situación se complique aún más en 2026.
Cruz Montesinos concluyó haciendo un llamado a que se busquen soluciones conjuntas entre gobierno y sector empresarial que permitan sostener a los pequeños negocios y proteger el empleo, mientras se mantiene el objetivo de mejorar las condiciones laborales de los trabajadores.






















