*El evento climático, resultado de una onda polar, aporta beneficios ecológicos y un llamado al turismo responsable en el volcán más alto de México.
Orizaba, Ver.– Con un manto blanco que cubrió sus laderas superiores, el Pico de Orizaba, la montaña más elevada de México recibió la primera nevada significativa de la temporada invernal 2025, fenómeno, registrado en zonas por encima de los 4 mil 300 metros sobre el nivel del mar, que dejó acumulaciones de hasta 12 centímetros de nieve, marcando el inicio de la estación fría en el emblemático volcán.
De acuerdo con Ricardo Rodríguez Deméneghi, coordinador del proyecto Salvemos al Pico de Orizaba, esta precipitación sólida es consecuencia del ingreso de una masa de aire polar procedente del noreste de los Estados Unidos, la cual generó un marcado descenso térmico en la región.
El especialista calificó el evento como una noticia positiva para el ecosistema local. “Esta nevada ayuda a mitigar, aunque sea parcialmente, las condiciones de sequía que se han hecho evidentes no solo aquí, sino en diversas zonas de Veracruz”, explicó.
El experto expresó su esperanza de que las bajas temperaturas se mantengan para favorecer la recarga hídrica del coloso, cuya cumbre alcanza los 5,636 metros de altitud.
La transformación del paisaje en un escenario blanco incrementa naturalmente el interés turístico y deportivo en el Parque Nacional Pico de Orizaba. Ante el flujo previsto de visitantes, tanto el coordinador del proyecto como las autoridades del área natural protegida hicieron un enérgico llamado a practicar un turismo responsable.
Rodríguez Deméneghi recomendó a los excursionistas planificar su visita con precaución: reportarse con las autoridades, cubrir los derechos de acceso correspondientes al ejido y al Parque Nacional, y utilizar únicamente las zonas de estacionamiento designadas para no obstruir caminos. Asimismo, enfatizó medidas de seguridad esenciales: “Es indispensable iniciar el descenso a más tardar a las 15:00 horas y portar ropa de abrigo especializada, incluyendo gorra y guantes, pues las condiciones en la montaña cambian de forma abrupta”.
Las autoridades ambientales recordaron que el Pico de Orizaba es un Área Natural Protegida, por lo que cada acción individual impacta directamente en su frágil equilibrio. Se exhortó a los visitantes a seguir prácticas fundamentales para la conservación: llevar de regreso toda la basura generada, permanecer en los senderos establecidos, utilizar exclusivamente las instalaciones sanitarias autorizadas y respetar por completo la flora y fauna silvestres.
Se hizo especial énfasis en prohibir terminantemente las fogatas, la extracción de cualquier elemento natural (plantas, rocas, suelo) y cualquier actividad que pueda degradar el entorno. “Una visita consciente no solo garantiza la seguridad personal, sino que es un acto directo de conservación para uno de los principales pulmones y reservas hídricas de la región”, subrayaron.
Con un tono esperanzador, Rodríguez Deméneghi se refirió a la nevada como una “Navidad blanca” para el volcán, un regalo natural que embellece y beneficia temporalmente a este ícono nacional. El mensaje conjunto para el público es claro: disfrutar de la majestuosidad del paisaje invernal, pero siempre con el máximo respeto y la responsabilidad que un patrimonio de tal magnitud exige y merece.





















