Aunque faltan muchas decisiones cupulares para poner en orden las desiguales filas morenistas, a las que han entrado tirios y troyanos, izquierdistas radicales, priistas corruptos y derechistas de la cepa más retrógrada, al parecer en Veracruz han dado un hasta aquí a diputados que se habían comportado como verdaderos fedayines en contra de su partido, antes incluso de haber tomado protesta en Palacio Legislativo.
Fue la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de Morena la que acordó la expulsión de sus filas de tres diputados locales José Magdaleno Rosales Torres, Augusto Nahum Álvarez Pellico y Jessica Ramírez Cisneros; de los dos primeros se dijo que fueron corrompidos y usados por el exgobernador Miguel Ángel Yunes Linares para evitar mayoría calificada en la votación para someter a juicio político al exfiscal hoy prófugo Jorge Winckler Ortiz,
En general, el comportamiento obsesivo por desacreditar a sus compañeros diputados de Morena, a funcionarios estatales emergidos de ese mismo partido y un constante boicoteo a las decisiones de la bancada fue lo que llevó a su expulsión.
Las quejas, interpuestas por Laura Yasmin Ugalde Colunga y otros, reunidas en el expediente CNHJ-VER-260/19, en contra de los tres diputados, con los que la bancada morenista en la práctica no contaba, señalan por ejemplo el intento por constituir otra fracción parlamentaria de Morena en el Congreso local, además de la denostación y calumnia pública en contra de Morena y de ciertos integrantes del partido.
En el documento se señala la cancelación del registro en el Padrón Nacional de Protagonistas del Cambio Verdadero y refiere tres agravios: No respaldar los juicios políticos en contra de Jorge Wickler, exfiscal de Veracruz; integrarse a la bancada de Juntos Haremos Historia y no a la de Morena en el Congreso, y realizar declaraciones en contra de miembros del partido Morena, representantes o miembros.
La ofensiva de José Magdaleno Rosales Torres, quien por cierto es identificado como parte de una corriente encabezada por el actual delegado federal Manuel Huerta Ladrón de Guevara, sucedió días antes de que tomara posesión la actual Legislatura, cuando acusó al gobernador electo y al que sería a la postre secretario de Gobierno de imponer criterios y ejercer presión sobre los diputados.
Recientemente encabezó un ataque mediático y político, junto con el diputado federal papanteco Jaime Humberto Pérez Bernabe (con el visto bueno por cierto de la diputada local por Martínez, Adriana Esther Martínez Sánchez), en contra de cuatro funcionarios del gobierno estatal morenista: Eric Cisneros, Secretario de Gobierno; Hugo Gutiérrez, de Seguridad Pública; Zenyazen Escobar, de Educación, y Roberto Ramos Alor, de Salud, entre otras cosas, por su supuesta intromisión en el desarrollo de las Asambleas Distritales de Morena.
Para colmo, los tres expulsados de Morena, junto con el llamado “diputado cortinas”, Erik Iván Aguilar López, quien llegó por el Partido del Trabajo desde el Distrito de Misantla (y quien también se le relaciona con la compra de votos por parte de Yunes a través del expriista Gonzalo Guízar Valladares), habían gestionado la creación de un grupo legislativo mixto en febrero pasado, denominado “Juntos haremos historia”.
Y mire que la hicieron, aunque no se integraron ni José Magdaleno Rosales, ni Jessica Ramírez ni Nahum Álvarez Pellico. Quien sí lo hizo en el inicio fue el diputado morenista por Córdoba, Rubén Ríos Uribe, aunque regresó muy pronto al redil y hoy es el Presidente de la Mesa Directiva del Congreso, al sustituir a José Manuel Pozos Castro, convertido en un simple diputado local.
Hoy el único que ha salido por su propia cuenta de toda relación con la ola que llevó a tantos diputados relacionados con Andrés Manuel López Obrador al Congreso veracruzano, es Erik Iván Aguilar López, quien luego de conformar el grupo legislativo Juntos Haremos Historia, hoy se ha incorporado a la fracción “mixta” de panistas que coordina la diputada Marijose Gamboa, y a rato, lo que mejor convenga a su bolsillo.
Como quiera que sea, los diputados propanistas no solo fueron expulsados de la bancada sino también de Morena, con la cancelación de sus registros en el padrón nacional de protagonistas del cambio verdadero.
La pregunta sería: ¿vendrán más ‘estatequietos’ y expulsiones en Veracruz? Lo cierto es que se sigue fortaleciendo el grupo político de Cuitláhuac García Jiménez y Eric Cisneros Burgos, en demérito del encabezado por Manuel Huerta Ladrón de Guevara, de quien se ha dicho que busca forjar otra organización partidista.
La impunidad en homicidio doloso, abominable
Si los datos que se han presentado sobre el incremento en materia de homicidio doloso en México durante el presente gobierno le pudieron parecer exorbitantes y preocupantes, lo cierto es que la respuesta de nuestras instancias de justicia para detener y castigar a los autores materiales e intelectuales ha sido (y sigue siendo) para llorar.
A quienes defienden al actual Presidente de la República en cualquier escenario, le comento que los datos que presentaré son de 2018, cuando solo le correspondió gobernar un mes, mientras el resto le correspondió a un casi olvidado Enrique Peña Nieto, a quien el actual gobierno lo ha puesto en un nicho de impunidad y, lo peor, no resolvió (como no ha resuelto el actual) el incremento en la violencia criminal y la actuación eficaz de las Fiscalías y el Poder Judicial.
Según datos adelantados por el equipo de Impunidad Cero, que el próximo martes 3 de diciembre presentará su tercer informe sobre el tema, la impunidad en homicidio doloso en México para 2018 fue de 89%.; es decir, solo se resolvió 1 de cada 10 homicidios.
En el informe que presentarán a medios la semana que viene, “Impunidad en homicidio doloso en México”, pondrán en perspectiva cómo está la situación por estado, aunque adelantan que en siete estados del país la impunidad en este delito supera el 95 %, lo que llanamente quiere decir que solo resuelven uno de cada 20 casos.
En efecto, en 2018 hubo 33 mil 521 víctimas de homicidio doloso y solamente 3 mil 600 sentencias condenatorias para ese delito.
Otro dato que adelantan es que el homicidio doloso se mantiene como la principal causa de muerte en los jóvenes, en particular de 20 a 24 años.
Esta es la tercera edición de este estudio, necesario –según señalan– para poder identificar cuáles son los niveles de impunidad en el homicidio intencional, un delito que afecta tanto a la sociedad.
En la presentación participarán el investigador Guillermo Zepeda, quien presentará los resultados de la investigación, mientras que el analista de seguridad Alejandro Hope y el Presidente del Consejo Asesor de Impunidad Cero, Federico Reyes Heroles, comentarán el reporte.
La cita es a las 10:45 am en el Auditorio del Club de Industriales, con dirección en Andrés Bello No. 29, Polanco, Ciudad de México.
Frases sin disfraces
“La más peligrosa de todas las debilidades es el temor a parecer débil”. J. B. Bossuet.
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