Córdoba, Ver.- Norma Romero Vázquez coordinadora del grupo de mujeres altruistas conocidas como Las Patronas lanzó un llamado de apoyo a la ciudadanía ante la escases de alimentos que día a día entregan a migrantes en su paso por la zona centro en tren o a pie.

“Estamos preocupadas porque no tenemos productos básicos para seguir entregando ayuda humanitaria a migrantes y por lo mismo vendemos diversos productos con la marca Las Patronas”.

Romero Vázquez, quien ha recibido diversos galardones internacionales a nombre del grupo Las Patronas por su labor y lucha dijo que el albergue “Esperanza del Migrante” continúa funcionando, aunque en los últimos meses la afluencia de centroamericanos que cruzan Veracruz rumbo al norte del país disminuyó sustancialmente.

Manifestó que para apoyar la compra de víveres continúan vendiendo mercancías como salsa macha, cilindros para agua, lapiceros, libretas, playeras, café molido, servilletas bordadas y souvenirs impresos con la marca Las Patronas.

Dijo que por la emergencia sanitaria solo que venden a través de envíos por paquetería y se pueden hacer los pedidos a los teléfonos 2717104875 y 2711399117 o al correo lapatrona.laesperanza@gmail.com

Hizo un llamado a la ciudadanía para que donen básicos y se pueda continuar ayudando a los centroamericanos con alimentos.

“Estamos preocupadas porque no tenemos arroz ni aceite; frijol aún nos queda, pero el arroz y aceite es lo que más se entrega”.

Informó que el número de migrantes que cruzan la zona disminuyó considerablemente: “Están subiendo entre 30 y 40 migrantes por tren y aparte los que llegan caminando”.

Dijo que la congregación La Patrona perteneciente al municipio de Amatlán ha sido impactada por muchos casos de Covid y los habitantes se espantaron.

“Muchos no creían y ahora todos usan cubre boca porque vieron que las personas comenzaron a fallecer a consecuencia del Covid 19”.

Indicó que en el albergue “La Esperanza del Migrante” se han tomado estrictas medidas para protegerse tanto las mujeres integrantes de Las Patronas como los centroamericanos que llegan.

“Usamos cubre bocas, gel antibacterial, el lavado de manos y la sana distancia. Los que llegan no entran al albergue, se atienden afuera donde se les da comida, se les pide que laven sus manos, se les aplica gel y se les toma la temperatura. Duermen en la capilla no dentro del albergue, por el cuidado de los demás”.