En el número 42 de la calle de la Santé, en el Catorceavo distrito, se encuentra la prisión que lleva su nombre. Se trata del último establecimiento penitenciario situado en pleno París, pues el resto de las prisiones ha sido transferido a las afueras de la ciudad.
Inaugurada en 1867, esta institución contaba con 1,000 celdas minúsculas que podían contener hasta 2,000 prisioneros.
Entre 2014 y 2019 la prisión de la Santé fue cerrada para proceder a importantes trabajos de renovación que costaron alrededor de 800 millones de euros. Esto permitió agrandar las celdas que pasaron de 7 a 9 metros cuadrados, pues también los reclusos tienen derecho a vivir dignamente.