Orizaba, Ver.- El representante de la Sociedad Civil en Orizaba, Jairo Guarneros Sosa lamentó la postura tomada por el vocero de la Diócesis de Orizaba, sacerdote Helkyn Enríquez Báez al señalar que no es con gritos ni con sombrerazos cómo se resuelven las cosas sino con el diálogo, porque después el clérigo asumió su responsabilidad como Diócesis de haber enviado a esos laicos golpeadores verbales a tratar de reventar un evento que representaba una diputada.
“No les tenemos miedo al intercambio de ideas ni de debates, ya sea laico o sea teológico, tenemos los elementos para que nos sentemos con ellos y en una mesa de respeto y el intercambio de debates, vamos a debatir”.
Expuso que una sociedad no avanza con este tipo de situaciones oscurantistas por parte de la iglesia respaldadas por la Diócesis que es lo más lamentable, “porque ña Diócesis por un lado nos dice que tenemos que serenarnos todos, bajarle a la violencia y por otro lado nos mandan a un grupo de violentadores, agrediendo a mi compañera…lamentablemente eso no es serenarse, nosotros ya les pedimos a los de este lado serenarse”.
Por eso, invitó a los grupos religiosos a que los convoquen para debatir y abordar esos temas y así, intercambiar los puntos de vista que tengan que hacer, pero de manera seria y sin vacilar, sin el doble discurso y la posición hipócrita de la iglesia no ayuda para que esto avance.