Orizaba, Ver.- El no haber llevado a discusión en el pleno de la Cámara de Diputados Locales para la reforma del Código Civil, la Diócesis de Orizaba celebró la buena actitud de los legisladores pues están abiertos a las diferentes voces que se han manifestado en torno a estos temas.
En entrevista, el vocero de la Diócesis de Orizaba, sacerdote Helkyn Enríquez Báez, dijo que se espera que los diputados tengan siempre sensatez y que escuchen las distintas voces que les ofrezca argumentos jurídicos, legislativos y los necesarios para que tomen buenas decisiones sin ideologías de un lado o del otro.
Indicó que el diálogo se debe de mover a una mayor altura para tomar buenas decisiones y que el fruto de estas reflexiones se concrete en leyes que beneficien el bien común y no solamente una agenda ideológica.
Señaló que esta iniciativa para reformar el Código Civil, fue de una diputada y está sometida a votación más no imposición.
“El diputado que es elegido por una comunidad debe dirigir su actividad legislativa en orden a los valores e intereses de la comunidad que lo eligió. Ahora a los diputados se les han señalado algunas realidades que requieren atención legislativa como la seguridad, salud, educación”.
Comentó que la iniciativa de la diputada Mónica Robles parecía una imposición ideológica y que de algún modo se reconoce que los diputados son sensibles a esta realidad que es prioritaria y es necesario que la atiendan.