Orizaba, Ver.- En un ambiente de creciente inconformidad, vecinos de la colonia Abelardo L. Rodríguez en Orizaba alzaron la voz en contra de la llamada “ventanilla única” para la realización de trámites de construcción.
Los colonos denunciaron que esta medida, lejos de facilitar procesos administrativos, se ha convertido en un obstáculo para ejercer su derecho a modificar y mejorar sus viviendas y comercios.
De acuerdo con los testimonios recabados, la autoridad local exige permisos incluso para labores básicas como pintar una fachada o remodelar un espacio interior.
Lo más indignante, aseguran, es que los colores y materiales deben contar con la aprobación de la Dirección de Obras Públicas y Desarrollo Urbano.
“No se puede ni cambiar una ventana sin que ellos decidan cómo debe verse”, señaló una habitante molesta.
Los afectados consideraron que estas restricciones no sólo son excesivas, sino que vulneran la autonomía de los ciudadanos sobre sus propiedades.
“No estamos hablando de construir edificios de diez pisos, sólo queremos mantener nuestras casas en buen estado”, expresó otro vecino.
Las quejas apuntan a un control desproporcionado por parte del gobierno municipal, disfrazado de ordenamiento urbano.
Ante esta situación, el candidato del Partido Acción Nacional (PAN) a la presidencia municipal de Orizaba, William Kuri, se pronunció al respecto durante una visita a la colonia.
En su mensaje, condenó el uso autoritario de la ventanilla única y prometió eliminarla en caso de llegar al poder.
“Esto se acaba en mi gobierno. Los orizabeños deben ser libres para decidir sobre su patrimonio”, afirmó tajantemente.
La propuesta de William Kuri fue recibida con aplausos por los presentes, quienes aseguraron que la promesa no quedará en discurso de campaña.
Algunos ciudadanos expresaron su esperanza de que este tema se convierta en una prioridad del próximo gobierno municipal, pues consideran que lo que está en juego no es solo la estética urbana, sino derechos fundamentales como la propiedad privada y la libertad de decisión.
Los orizabeños, ya están cansados de restricciones injustificadas, parecen dispuestos a exigir que Orizaba, como bien dijo el candidato panista, “vuelva a ser libre”.