Orizaba, Ver.- Desde su inauguración en el año 1929, el mercado municipal “Venustiano Carranza”, mejor conocido como el mercado de Flores de Orizaba, ha sido testigo fiel de diversas generaciones de personas dedicadas a la floristería que a través de los hijos, nietos y bisnietos van dejado el legado de este arte.

En entrevista la Dolores Ríos Hernández, recordó que, siendo muy niña, su abuelo Enrique Ríos Daza quien fuera fundador de este zoco, le inculcó el amor por las flores y a pesar de los años y las crisis económicas que han vivido dentro de la venta de flor, ha decidido continuar este legado.

Recordó que el mercado fue construido con techos y pisos de cemento armado y hasta 1943 comenzó a albergar a comerciantes que se dedicaron generación tras generación a la realización de ramos, arreglos y otro tipo de adornos que se enfocan en flores, albergando hoy a aproximadamente 700 familias que se dedican a esta actividad.

Por su parte Yasmín Cabrera, otra comerciante del mercado Venustiano Carranza, agradeció la existencia de este zoco que desde 1929 es sustento de varias familias que cumplen el legado de bisabuelos, abuelos y padres y hoy, este mercado que tiene como dueños a la cuarta e incluso quinta generación de familias.