El presidente Andrés Manuel López Obrador logró superar luego de dos semanas el virus del Covid que trae al mundo asolado y del que pocos pueden tener fortuna de contarlo.
Regresa y agradece a su equipo médico el haberlo tratado con toda oportunidad y eficacia, aunque advierte en su conferencia matutina del lunes que no utilizará el cubrebocas ni lo hará obligatorio y esperará su turno en la vacunación.
Hasta aquí lo de sobra conocido.
Ahora entra de nuevo a sus actividades y a su programa esencial de gobierno, basado en hacer correcciones de una herencia plagada de errores y corrupciones también de sobra conocidas.
Sus cambios consisten esencialmente en recuperar la rectoría legal y económica del estado mexicano, mantener a su partido en el poder y de paso ocupar un digno lugar en la historia.
De paso seguir actuando sobre los temas centrales que atañen a todos: la línea que divide salud y reanudación de actividades productivas (en el inter la llegada y aplicación de vacunas tan peleadas); recuperación, en la medida de las circunstancias, de los sectores más afectados (turismo y servicios, entre ellos); frenar la ola de violencia, falta de justicia y aplicación de las leyes; y de paso restaurar la unidad que tanta falta hace.
Estos asuntos cobran vital importancia para el ejecutivo federal debido a que las elecciones del 6 de junio serán un referéndum a su gobierno.
Mucho se sigue cuestionando la construcción del nuevo aeropuerto (el de Texcoco, negocios evidentes y un desastre ecológico y social), el tren Maya (urge propiciar mejores condiciones de vida de la región y el turismo) y la refinería de Dos Bocas (hay más de 25 millones de unidades y seis refinerías desde los ochentas).
Por eso hay razones justificadas para hacerlos porque si algo urge es mayor infraestructura, más en lo que corresponde al sur y sureste, por siglos marginados más que centro y norte.
Así que seguiremos viendo el comportamiento del ejecutivo federal en lo que concierne por supuesto a la vida pública.
En el caso de la pandemia queda a los medios de comunicación y a la sociedad entera seguir las medidas precautorias de contagios y esperar turno en la aplicación de vacunas cuando por fin lleguen.
- Semana de luto: el fallecimiento del gran amigo Fernando Macías Cué; abrazo a su familia querida.
- También del amigo y empresario xalapeño Abraham Bouchez y de la periodista coatzacoalqueña Azucena Rosado Sosa. A sus familias, abrazo.