*Y cuando despertaron, Ahued se resistía. Camelot.
Muy temprano por la mañana, diría el poeta, comenzó a circular en redes sociales un llamado a Ricardo Ahued Bardahuil, senador de la República y hombre embasado para lo que viene. El llamado era de morenistas que, le pedían, se despoje de su calidad de Senador y vaya por la alcaldía de Xalapa, donde una vez ya moró y gobernó. Lo solicitan, Juan Javier Gómez Cazarin, presidente de la Junta de Coordinación Política del vapuleado Congreso, donde ahora se asoman visos de corrupción; Ana Miriam Ferráez Centeno, diputada, Rosalinda Galindo y Norheny García. La noticia corrió rápido. Los ahuedistas, dicen que es un distractor para que, si se engancha, se olvide por siempre y para siempre de su aspiración a ser gobernador del Estado, en la que viene o en la que se presente, y que no va a morder el anzuelo que le mandan desde Palacio. Morena tiene todo en contra, suponen los agoreros de las elecciones, que la alcaldía xalapeña la pierde por el mal trabajo de su alcalde.
EL VIDEO IMPACTANTE
Comenzó a circular por las redes. A mí me tocó verlo en directo, porque veo todas las noches el noticiero de Ciro Gómez Leyva. Sucede que el comunicador presentó la muerte en vivo. Su reportero, cámara en mano, entró a tres sitios muy humildes, de gente pobre, donde un paciente de Covid estaba tirado en el suelo luchando por su vida, sin medicamentos y oxígeno, y alguien, un paramédico a quien pidieron ayuda, estaba resucitándolo. No lo logró. Y se escucha claramente cuando le dice a la esposa: ‘Ya está muerto, ya no respira’. Impactante y doloroso que la gente esté muriendo en sus casas sin las asistencias médicas. Cuando íbamos a tener la medicina de Noruega y acabamos en el piso, como en Cojinillo, en el suelo. Fueron cuatro casos, los cuatro impactantes. Buen reportaje, crudo, cuando la muerte toca a las puertas de la gente.
EL JUBILADO PRESIDENTE
El presidente AMLO, dentro de cuatro años llegará a sus 71 años, un buen tiempo para el retiro, sobre todo, después de haber escalado la más alta montaña de la política, ser presidente de la Nación. Anunció que se va a jubilar y seguro se va a su rancho, que espera el cambio generacional: “Lo he dicho muchas veces, incluso promoví la reforma de la Constitución para que exista la revocación del mandato, y me voy a someter a la revocación del mandato el año próximo. Si el pueblo dice ya no queremos que siga, me voy, porque el pueblo pone y el pueblo quita. Yo termino, si paso la prueba de la revocación del mandato, termino en septiembre del 24 y ahí sí, allá donde va a valer mucho más la quinta. Y misión cumplida, jubilación y no vuelvo a participar en nada. Ni líder moral, ni cacique político ni opositor, nada de nada”, aseguró.
En ese tiempo de 2024, la historia comenzará a juzgar su Administración. Y la historia es una gata que siempre cae de pie, según el poeta. Y el relevo generacional, por ahora se ve en dos personajes de la política, Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores y apagafuegos de este gobierno, y una mujer, la jefa de Gobierno de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, por ahora no se ven otros personajes, aunque al tiempo pudieran salir algunos más.
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