*Su amigo de juegos lo mató de un disparo en la cabeza
*Alcaldesa entregó una despensa en apoyo a la familia

La Perla, Ver.- En medio del llanto y la tristeza, familiares y el pueblo entero de la localidad de El Tejocote del municipio de La Perla, despidieron al pequeño Samuel a quien la vida le fuera arrebata de un balazo, por uno de sus compañeros de juego.

Fue después del mediodía que el cortejo encabezado por el ataúd blanco que contenía el cuerpo del menor partió de su humilde casa, con rumbo a donde será su última morada.

Tras los restos de Samuel un contingente de niños y adultos incrédulos, se preguntaban los motivos que orillaron para que su vecino, compañero de escuela y amigo de juegos, terminará con la vida del niño quien recién el viernes, aun jugaba en la escuela rural de esta localidad.

Recordaron que la tarde del domingo, los menores jugaban en las “maquinitas” de la tienda de la esquina, en donde tras terminar su juego el menor de 10 años se retiró a su casa, por lo que Samuel echo su moneda para continuar el juego, para que minutos después su vecinito regresara con el arma de fuego de su padre y la accionara contra el menor disparando en la cabeza.

Al caer el cuerpo del Samuel, la madre del niño que disparó cogió entre sus brazos el cuerpo aún con vida y lo entregó a una de las tías del lesionado quien junto con su madre lo trasladaron a la cabecera municipal para solicitar el apoyo de Protección Civil para llevar al niño al Hospital Regional de Orizaba en donde perdió la lucha debido a la lesión que presentaba.

Los padres del menor exigieron a las autoridades se haga justicia, para que los padres del menor “E” quienes vivían a 50 metros de ellos, reciban un castigo ejemplar pues consideran un arma de este tipo no se puede dejar sin el cuidado necesario sobre todo cuando no se da la educación necesaria en los temas de violencia y lo peligroso que pueden ser las armas.

Expusieron que, tras ser velado durante dos días en su vivienda, por la mañana de este martes, llevaron el cuerpo de su hijo a la iglesia de la localidad en donde el sacerdote dio la bendición al féretro y el pueblo entero elevo sus oraciones por el descanso estéril de Samuel.

Vecinas del niño asesinado, lamentaron que las autoridades locales, hayan mostrado omisión ante estos hechos y la ayuda de la alcaldesa Ruth García se limitará a una despensa, sobre todo al saber perfectamente que esta es una localidad en donde existe un alto grado de marginación y pobreza, por lo que la comunidad fue la que en sus posibilidades buscó ayudar a los padres.

Sobre el menor que accionó el arma, expusieron que no sólo era compañero de escuela, en donde Samuel cursaba el sexto grado y el otro niño, el quinto, sino que eran vecinos, pero tras los hechos, los padres y el niño huyeron de la localidad, sin dejar rastro, solo el dolor a la familia y al pueblo entero.

Por ello dijeron desde que se dieron los hechos apoyaron a esta familia en los días del velorio al igual que este martes en el que prepararon arroz y frijoles para compartirlo, tal y como lo hacen con el dolor de esta familia.

A la salida de la humilde casa, los padres se despidieron del niño persignaron el cuerpo de su amado hijo, para después cerrar la caja fúnebre y caminar por un largo rato al lejano panteón, en donde tuvieron que subir a otra pequeña loma para depositar sus restos.

Los pobladores de esta comunidad dijeron estar conmocionados porque en este sitio nunca había ocurrido un caso similar y no se explican por qué el pequeño de 10 años disparó sin mediar palabras directo a la cabeza de Samuel.