Río Blanco, Ver.- Con una falta de ética y moral, calificó el senador Manuel Huerta Ladrón de Guevara a los funcionarios públicos que han levantado la mano para aspirar a una precandidatura en los procesos internos de Morena, pues asegura deben renunciar a sus responsabilidades actuales para postularse a otros puestos.

Entrevistado previo al evento de los Mártires del 7 de enero en río Blanco, el senador hizo un llamado a la reflexión sobre la ética política y la responsabilidad de los servidores públicos. “Estoy sorprendido por el espíritu democrático que existe, donde todo el que quiere participar se apunta, pero también me duele ver la gran irresponsabilidad de muchos colegas que, estando en cargos públicos, están buscando otro puesto sin siquiera renunciar a su cargo actual”.

Recordó que, cuando decidió postularse para la gubernatura, su primer paso fue dejar de lado sus responsabilidades previas, con el fin de cumplir con lo que él considera una obligación ética y moral. “Cuando competí para ser senador, lo primero que hice fue renunciar a mi trabajo. Esa es una obligación ética: si quieres otro cargo, tienes que dejar el que tienes”, recalcó.

Destacó la falta de coherencia de ciertos funcionarios que, según él, no han cumplido con esta norma, y lo calificó como un acto de “falta de ética”. “No puedes estar en un cargo público y querer otro sin renunciar a tu puesto. Es una cuestión de principios.

En Morena, deben predicar con el ejemplo y aplicar de manera estricta la norma de que “no mentimos, no robamos, no traicionamos al pueblo. Este es un tema de ética política. Si no renuncias a tu puesto, estás comprometiendo tu integridad”.

Resaltó que el único caso que, según él, representa un ejemplo de honestidad es el de un colega en Xalapa, quien sí renunció a su cargo antes de lanzarse en busca de otra posición. “Eso es lo que debería hacerse. Es un ejemplo de lo que hay que hacer.

Lo que debemos hacer es predicar con el ejemplo y recordar que los ciudadanos deben estar al tanto de quiénes somos y qué estamos dispuestos a hacer por ellos. La política no se trata de cambiar de puesto como si fuera un juego. Es una cuestión seria, y como tal, debe manejarse”.