Al solicitar su registro como candidato a Gobernador del Estado, de la Coalición Fuerza y Corazón por Veracruz, el pasado sábado ante el OPLE, Pepe Yunes Zorrilla ofreció un dato en su discurso que alentó a muchos veracruzanos para intensificar sus intenciones para apoyar al nacido en Perote.

Estamos parejos, dijo en referencia a la competencia de la alianza que encabeza Morena, ya que el tercer competidor por el mismo cargo, postulado por Movimiento Ciudadano, no figura en la competencia real por el Gobierno de Veracruz.

La pelea política por Veracruz será sólo de dos, Pepe Yunes y Rocío Nahle, que tendrán que presentar sus propuestas de gobierno para los veracruzanos para que éstos, definan el cambio o la continuidad. En ese sentido la elección también calificará al gobierno actual que es de Morena.

Los 60 días de campaña serán intensos, los aspirantes son distintos en todos los sentidos, lo que ofrece una competencia real y más allá de las encuestas que pagan los equipos de ambos frentes y que difunden a capricho y conveniencia, los días de campaña los obligará a presentarse tal como son ante el electorado.

Lo cierto es que en este proceso electoral, Pepe Yunes repite como candidato al Gobierno de Veracruz, en circunstancias totalmente distintas a las de hace seis años, con el respaldo del PRI, PAN y PRD en la Coalición Fuerza y Corazón por Veracruz. Hace seis años acudió solo por el PRI y sus votos lo colocaron en tercer lugar. Sin embargo, en esta elección y como aspirante de la Coalición Fuerza y Corazón por Veracruz ya está en una competencia con posibilidades reales de ganarle al partido en el gobierno.

De esa manera lo que parecía un día de campo para Morena y su candidata, se convierte en una competencia reñida en la fotografía de este momento, habrá que esperar el arranque y comportamiento de las campañas que empiezan en ocho días y que definirán con mayor precisión al delantero o delantera rumbo al 2 de junio.

Desde los curtos de guerra se alistan las estrategias, algunas ya están en desarrollo en esta etapa de inter-campaña y desgraciadamente tienen que ver con guerra sucia. El arbitro de la elección que es el Organismo Público Local Electoral tendrá que ser muy objetivo para evitar malos entendidos que lleven a la percepción de una injusticia electoral.