Luisa Alvarado y Viviana Franco, junto con su abuela, Mercedes Castán González, exigieron al Gobierno del estado que pare la persecución política en contra de su padre, Rogelio Franco Castán.
Tras conocer la noticia de que su papá podría abandonar la prisión este día, la dos jóvenes expresaron su felicidad tras dos años y medio de prisión del exfuncionario.
“Es una felicidad inmensa la que sentimos en este momento, digo lo van a tener en arraigo domiciliario, pero con nosotras, entonces estamos súper, súper contentas”, expresaron a las afueras de Pacho Viejo, Coatepec.
Y agradecieron a quienes las han acompañado durante este largo y complicado proceso, en el que cada vez que veían “un poco de luz” le imputaban algo más.