El 3 y 4 de septiembre de 2024, la Cámara de Diputados de México vivió una jornada histórica al aprobar en lo general y en lo particular las reformas constitucionales al Poder Judicial, propuestas por el Ejecutivo. Este evento, que culminó con una votación mayoritaria, marca un hito en la estructura y funcionamiento del sistema judicial mexicano.
Las reformas al Poder Judicial han sido un tema de debate intenso en México durante los últimos meses. Propuestas por el Ejecutivo, estas reformas buscan transformar profundamente la manera en que se eligen y operan los jueces, magistrados y ministros en el país. Entre los cambios más significativos se encuentran la elección por voto popular de jueces y magistrados, la reducción del número de ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de 11 a 9, y la eliminación de los fideicomisos del Poder Judicial de la Federación
La sesión en la Cámara de Diputados comenzó al anochecer del 3 de septiembre en una sede alterna debido a que jueces opuestos a la iniciativa bloquearon el acceso al Congreso federal. A pesar de las tensiones, los diputados se reunieron para debatir las reformas propuestas. La discusión se extendió por más de 12 horas, reflejando la complejidad y la importancia del tema.
Durante el debate, los diputados de diferentes partidos expresaron sus puntos de vista. Los legisladores a favor de las reformas argumentaron que estos cambios son necesarios para democratizar el Poder Judicial y hacerlo más transparente y accesible para la ciudadanía. Señalaron que la elección por voto popular de jueces y magistrados permitirá una mayor rendición de cuentas y reducirá la corrupción.
Por otro lado, los opositores a las reformas advirtieron sobre los riesgos de politizar el Poder Judicial. Argumentaron que la elección por voto popular podría comprometer la independencia de los jueces y magistrados, y que la eliminación de los fideicomisos podría afectar la operación y financiamiento del sistema judicial.
Finalmente, después de horas de debate, se procedió a la votación. Con 359 votos a favor, 135 en contra y 0 abstenciones, la Cámara de Diputados aprobó en lo general el dictamen que reforma el Poder Judicial. Posteriormente, se votaron las reservas y modificaciones propuestas, aprobándose en lo particular con una mayoría calificada.
Las reformas aprobadas incluyen varios cambios significativos a la Constitución:
Elección por Voto Popular: Jueces, magistrados y ministros serán elegidos mediante sufragio directo de la ciudadanía. Reducción del Número de Ministros: El número de ministros de la SCJN se reduce de 11 a 9, con un mandato de 12 años en lugar de 15. Eliminación de Fideicomisos: Se eliminan los 14 fideicomisos del Poder Judicial de la Federación, lo que implica una reestructuración del financiamiento del Poder Judicial. Jueces sin Rostro: Se introduce la figura de “jueces sin rostro” para proteger la identidad de jueces en casos de alto riesgo. Duración del Cargo: Se modifica la duración del cargo de los ministros de la SCJN y se eliminan sus “haberes de retiro” 45.
La aprobación de estas reformas ha generado diversas reacciones en el ámbito político y social. Los partidarios de las reformas celebraron la votación como un paso hacia la democratización y transparencia del Poder Judicial. Sin embargo, los críticos expresaron su preocupación por la posible politización del sistema judicial y la independencia de los jueces.
La opinión pública también se ha mostrado dividida. Algunos ciudadanos ven con buenos ojos la posibilidad de elegir a sus jueces y magistrados, mientras que otros temen que esto pueda llevar a una mayor influencia política en el Poder Judicial. Las redes sociales y los medios de comunicación han sido un reflejo de esta polarización, con debates acalorados sobre los pros y contras de las reformas.
Tras la aprobación en la Cámara de Diputados, el dictamen pasa al Senado para su revisión y confirmación. Se espera que el Senado debata y vote sobre las reformas en la próxima semana. De ser aprobadas, estas reformas representarán uno de los cambios más significativos en la historia reciente del sistema judicial mexicano.
La aprobación de las reformas al Poder Judicial en la Cámara de Diputados de México es un evento de gran relevancia que podría transformar profundamente el sistema judicial del país. A medida que el dictamen pasa al Senado, el debate sobre los beneficios y riesgos de estas reformas continuará. Lo que es claro es que este proceso ha puesto de manifiesto la importancia de la independencia judicial y la necesidad de un sistema transparente y accesible para todos los ciudadanos.