Cordoba,Ver.- A pesar de que Córdoba es reconocida como una ciudad cafetalera, los cordobeses no son consumidores exigentes y mucho menos conocedores del aromático. Producción cafetalera que no ha sido explotada en su totalidad, al contrario las fincas han sido derribadas para dar paso a la mancha urbana.
Damna Reyes Hernández y Hugo Antonio Tress Romero, ganadores de la taza de excelencia 2021, se pronunciaron por conservar y renovar las fincas de café, ya que sostuvieron que Córdoba tiene todo para rescatar su vocación cafetalera.
Afirmaron ” escuchan Córdoba en otros lugares y dicen aguas con estos, porque estos si saben”, pero es todo lo contrario no hay interés, son los jóvenes -dijeron- los que están retomando las fincas de sus papás o de los abuelos, los que están decidiendo trabajar con café y no sembrar otras cosas.
Tress Romero mencionó que los productores de antaño, cuando vino la devaluación del aromático cambiaron los plantíos por caña, esta actividad no ha sido explotada y apenas está retomando impulso.
Un kilo de café verde sin tostar se vende hasta en 450 pesos el kilo y hay quien ” nos ha comprado el café verde lo tuestan y lo venden hasta en 900 pesos”.
Acusó “aquí en Córdoba muy pocas personas pueden pagar ese precio, no lo quieren pagar además”.
Trabajar con café requiere mucho trabajo, pero vale la pena y es importante -sostuvieron- que los productores se involucren en todo el proceso del aromático.
Indicaron que en Córdoba se requieren más variedades, pero sobre todo un proyecto para conocer realmente la cantidad de plantaciones.
Propietarios de finca kitos, la cual forma parte del recorrido rural de turismo, y en la que se realiza la cata de café, asentaron que Córdoba tiene un prestigio cafetalero por la calidad del aromático que se produce, el cual hay que rescatar.