No cedas frente a los malvados, sino oponte a ellos ardientemente. Camelot.
No salíamos del asombro del crimen terrible de una niña de 8 años y de los justicieros que al grito de ojo por ojo, dieron cuenta de los presuntos malhechores, cuando al otro día o unos días después, una mujer que era candidata a la presidencia municipal de Celaya, cayó abatida por un par de sicarios que en moto le propinaron 6 balazos. Cuando iban a comenzar las campañas, todo mundo alertó de que el crimen organizado ya tenía controlados varios estados y territorios, al grito de abrazos y no balazos se despacharon con la cuchara grande. El asunto es que, cuando una candidata o un candidato no les gustan, lo ejecutan a balazos. Y huyen y hay impunidad y si los detienen no dejan de ser dos sicarios que saben que también se juegan la cárcel, nunca caen los autores intelectuales. Somos noticia en el mundo por la crueldad del país, porque aquí, como la canción, la vida no vale nada. Los matan en estados donde gobiernan todos los partidos políticos, ninguno se salva aunque se tiren mierda unos a otros. La violencia llegó a este México y solo queda la esperanza que, si Claudia gana, el nuevo secretario de Seguridad, que seguro será el nieto del general, ponga orden aquí o, si gana Xóchitl, ya tiene a la gente que pondrá orden y dejará atrás eso de los abrazos. Si no pueden llamen a Bukele y que les diga cómo apaciguó un país. No se lo merecen las y los candidatos que buscan una posición. Mataron no solo a la candidata sino por ahí se llevaron a un regidor, porque cuando sueltan bala las balas tocan a los inocentes. Aunque allí todos eran inocentes.
LA TRAGEDIA QUE SE FUE
Después de que estuvimos por unos días en los noticieros nacionales, cuando la indolencia del gobierno de Veracruz permitió que los pastizales y los cerros ardieran perdiendo miles de hectáreas que sufrieron daño. Ya todo pasó y ahora lo importante, aunque ningún programa de gobierno federal lo contemple, el asunto es venir a reforestar todo, sembrar árboles y más árboles para que, aunque demoren algunos años, esta zona que es boscosa vuelva a tomar el panorama que tenía. Pero no hay fondos federales para nada de eso. Conafur no tiene y el gobierno ya se va y quedará para la gente que viene a gobernar, la Sheinbaum o Xóchitl, volver a mirar a esta zona y reforestar lo más pronto posible, porque eso mismo permite que no haya agua y que los mismos manantiales se vayan secando, como ha ocurrido en los linderos del Pico de Orizaba, que los madereros la devastaron y ahora llega muchísima menos nieve. Algo hay qué hacer.
LOS BATAZOS A 2 MIL METROS
Escribí ayer que los Yankees de Nueva York se quejaron de jugar en CDMX a tanta altura. Un lector de San Francisco, California. Carlos Lartigue, me escribió y expuso: “Así es Gilberto. Mayor altura significa menos presión atmosférica que hace que la bola vaya más rápida y tu tiempo de bateo tiene que cambiar. Te acuerdas del gran salto triple en las olimpiadas de México…el tipo solo “flotó” un poco. ¡Abrazo!, y a cuidar esa salud”.