Córdoba, Ver.- La iglesia católica de Córdoba encabezada por el obispo Eduardo Carmona Ortega, los sacerdotes y laicos de la Diócesis de Córdoba así como miles de feligreses católicos participaron este día en las ceremonias religiosas para recordar la pasión y muerte del redentor, Jesús de Nazareth.
Primero fue el viacrucis efectuado por la mañana donde se recordó el trayecto de Jesús cargando la cruz, siendo flagelado por soldados romanos y con una corona de espinas impuesta.




A las trece horas se hizo mención de las palabras que el nazareno dijo a su Dios Padre mientras que a las 15 horas se realizó el descenso del cuerpo de la cruz, recordando aquel día en que Jesús ofreció su vida como el Cordero de Dios que vino a salvar al mundo.
Tras el descenso del cuerpo miles de católicos acompañaron la réplica de Jesús.




La iglesia católica rememoró al lado de su feligresía el amor y entrega de Jesús quien murió para lograr el perdón de los pecados de la humanidad.



Una frase que siempre recalcó en su evangelio fue: Nadie va al Padre si no es por mí.