Neuralink es otro de los proyectos en los que trabaja Elon Musk. Esta empresa de “investigación médica” es lo más avanzado del empresario ya que pretende conectar los cerebros humanos con una Inteligencia Artificial bajo “lazos neuronales”.
El objetivo es conectar cerebros humanos con computadoras para combatir enfermedades como el Parkinson, el Alzheimer o parálisis por accidentes u otros. Y en unas décadas: crear una especie de híbridos cerebro-máquina.
Avances de Neuralink
Las últimas novedades de Neuralink las acaba de presentar Musk en la Academia de Ciencias de California, donde reveló sus planes para comenzar los ensayos en humanos en el segundo trimestre de 2020, comenzando a implantar dispositivos en humanos paralizados, permitiéndoles controlar smartphones o computadoras. La unión se realizaría con electrodos que permitirían los lazos neuronales para aumentar las capacidades cognitivas.
La idea no es nueva y está basada en la interfaz cerebro-computadora, una tecnología basada en la adquisición de ondas cerebrales que luego son procesadas e interpretadas por una máquina u ordenador. La tecnología logra buscar un canal natural de interacción entre el hombre y la máquina y, también, el acceso a toda la información cognitiva y emocional humana.
El primer gran avance anunciado son los “hilos” flexibles, que tienen menos probabilidades de dañar el cerebro que los materiales que se usan actualmente en este tipo de interfaces. Estos subprocesos también crean la posibilidad de transferir un mayor volumen de datos con “hasta 3.072 electrodos por conjunto distribuidos en 96 subprocesos”.
Además de desarrollar los hilos, el otro gran avance de Neuralink es una máquina (parecida a una de coser) que los incrusta automáticamente. Para el futuro, los científicos de Neuralink esperan usar un rayo láser para atravesar el cráneo, en lugar de taladrar agujeros, explicó Musk.
Estos hilos conectarán sensores implantados en la superficie del cráneo y transmitirán la información a una computadora llamada The Link que se encuentra detrás del oído externo. Con ello, podrás conectarte a un smartphone a través de una aplicación.
Los primeros experimentos con humanos los realizarán neurocientíficos en la Universidad de Stanford. “Esperamos tener esto en un paciente humano para finales del próximo año”. El empresario aseguró que ya habían conseguido que un mono controlara una computadora con su cerebro y que pruebas avanzadas con ratones continuaban.
Musk quiere ir más allá de las aplicaciones prácticas para combatir parálisis o enfermedades neurodegenerativas como el Parkinson o el Alzheimer y cree que en el futuro los humanos deben fusionarse con la Inteligencia artificial si no quieren acabar convirtiéndose en algo inútil e innecesario: “Creo que con el tiempo veremos una fusión entre la inteligencia biológica y la digital. Esto se producirá sobre todo por cuestiones de ancho de banda, la velocidad con la que se conectará tu cerebro y tu versión digital. En el futuro tendrá que ser mucho más rápido”.
Las cuestiones éticas y los peligros de la fusión de humanos con máquinas también son monumentales. Los expertos advierten que los avances en Inteligencia Artificial y en paralelo la explosión de unos robots cada vez más humanos marcarán un punto sin retorno en el mundo que conocemos y tendrán implicaciones de todo tipo para las que debemos prepararnos.