Orizaba, Ver.- Como un verdadero “robo” califican transportistas el excesivo cobro que les hacen las empresas de grúas, por el arrastre de sus unidades, pues en algunos casos se tienen que pagar hasta 150 mil pesos por 10 kilómetros.

Sobre este tema, el delegado de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar) en la zona Córdoba-Orizaba, Enrique Rustrían Villanueva, dijo que sumado a las grandes pérdidas que tienen cuando sufren algún accidente o son víctimas de rapiña, esto es un duro golpe para los camioneros pues los seguros no cubren estos pagos.

Detalló que cuando ocurre un accidente o actos de rapiña, la unidad debe ser trasladada al corralón y las empresas de grúas no tienen un límite tarifario por el costo de arrastre y abanderamiento, por lo que por la liberación de la unidad llegan a cobrar entre 100 a 150 mil pesos.

Expuso que el problema es común con las grúas de concesión estatal, pues operan sin que la autoridad les haga algo para frenar los cobros. “Son tarifas muy altas las cuales nos están cobrando para el arrastre de vehículos que son robados”.

Señaló que el seguro ya no cubre el arrastre de la unidad cuando es por un robo, sin embargo la autoridad es la que pide a la grúa para que se efectúe el arrastre al corralón aunque la unidad esté en condiciones para trasportarse por sí sola, por lo que el transportista debe asumir el gasto que en algunos casos es hasta por arriba de los 100 mil pesos, “a veces hasta 150 mil pesos por un arrastre de 10 kilómetros; por lo que ya consideran eso como un robo”.

Agregó que el problema se genera cuando se busca liberar el vehículo después de 15 o 20 días, ya que se tiene que hacer el pago a las grúas. “Hace años teníamos arrastre en la ciudad para auto particular de 2 mil 500 pesos, pero ahorita hablamos hasta de 14 mil pesos, entonces en vehículos de carga pesada estamos hablando de 80 a 100 mil pesos por remolque”.