Con motivo de la Iniciativa presentada con proyecto de decreto que propone la modificación de los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en materia de áreas y empresas estratégicas, el empresario Veracruzano Ricardo Ortega López, director de Oil & Gas Alliance, expuso ante senadores los logros y beneficios que esta reforma traería para la industria energética nacional.
En resumen, expuso ante senadores que “el sector energía tiene retos y desafíos en su mayoría marcados por la interpelación entre regulaciones, reformas legislativas y los intereses tanto del Estado como de los actores privados y no es para nada simple más bien esta combinación es una compleja estructura”.
Dijo que “en este sentido, les presento un enfoque del dictamen de ley que lo resumo de la siguiente manera:
1.- Reformas Legislativa Propuestas: Se están considerando cambios significativos en la Ley de la Industria Eléctrica, que busca redefinir la participación de los particulares en el sector, garantizando que la empresa pública del Estado tenga un papel prevalente. Las reformas apuntan a que los particulares puedan participar en actividades específicas, pero siempre subordinadas a la responsabilidad social del Estado de garantizar la continuidad y accesibilidad del servicio público de electricidad.
2.- Implicaciones para Empresas y Consumidores: Las modificaciones propuestas tienden a aumentar el control estatal sobre la industria eléctrica, lo que ha generado resistencia por parte de agentes privados que consideran que sus inversiones y derechos podrían verse amenazados.
Esto ha llevado a impugnaciones judiciales en defensa de los intereses de los particulares, lo que ha complicando la implementación de soluciones efectivas para los problemas del sector.
3.- Fuentes de Energía Renovable y No Renovable: Aunque el dictamen menciona la necesidad de modernizar y adecuar los permisos y normativas relacionadas con la generación de energía, no hay un enfoque claro que favorezca decididamente las fuentes renovables frente a las no renovables.
Sin embargo, se sugieren cambios en los certificados de generación de energía limpia y en las tarifas eléctricas, lo que podría implicar un intento de alinearse más con objetivos de sostenibilidad.
4.- Riqueza Histórica de la Legislación: El marco normativo ha evolucionado desde la nacionalización de 1938, pasando por reformas que abrieron la puerta a la participación privada a partir de 1992 y el Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Esta historia se refleja en la actual situación, donde se reconoce que el desarrollo de la industria eléctrica ha estado intrínsecamente ligado a cuestiones sociales y económicas.
5.- Perspectiva General: La dualidad actual entre la utilidad privada y la social en la industria eléctrica subraya la necesidad de encontrar un equilibrio entre los intereses de los consumidores, las empresas públicas y privadas, así como la política energética del Estado . Las últimas reformas buscan revertir el enfoque de liberalización del sector, promoviendo en cambio una visión más estatal y controlada que prioriza el interés social.
En conclusión, “El sector energía de México es un reto y requiere de lideres que enfrente este status QUO” y el análisis del dictamen refleja un panorama donde la interacción de los cambios legislativos, intereses de diversos actores y la historia del sector energético crean un contexto complicado que impacta tanto a empresas como a consumidores en México.
Este enfoque más estatalizado en la regulación de la electricidad es central para comprender los retos y oportunidades que enfrenta la industria en la actualidad, lo que requiere lideres capaces de gestionar la estabilidad como un compromiso para todos los que forman parte de este sector.
“Con ello, México se adecua a las circunstancias, a la modernidad y a nuevas formas de funcionabilidad entre la empresa estrategica y el Estado”