Orizaba Ver.-Desconocidos saquearon la residencia del empresario Gabriel Alejandro Fernández Vonhauske, donde obtuvieron un botin de más de un millón de pesos, aprovechando la nula y pésima vigilancia de la Policía Municipal, quien ya fue rebasada por la delincuencia.

Los hampones escaparon con toda impunidad a bordo de un vehículo no identificado, pues los operativos de vigilancia son un rotundo fracaso.

El empresario afectado acudió ante las oficinas de la Fiscalia de Orizaba, para interponer formalmente su denuncia por el delito de robo en contra de quien o quienes resulten.

Por cierto el agraviado fue acompañado por el coordinador de seguridad pública municipal, el ex almirante quien en lugar de estar preocupado por la grave inseguridad que prevalece en Orizaba, ahora se dedica a asesorar a personas pudientes que han sido víctimas de la delincuencia.
El robo

Según se conoció el empresario acompañado de su familia llegó a su residencia ubicada en Paseo de las Palmas, la madrugada de este domingo luego de de ausentarse algunos días.

Al penetrar grande sorpresa se llevó al descubrir todo se encontraba en completo desorden, al revisar el inmueble confirmó que los delincuentes se habían apoderado de joyas, objetos de valor y dinero en efectivo.

Debido al robo que sufrió se trasladó a la Fiscalia de Orizaba, donde interpuso formalmente su denuncia por lo que peritos de los Servicios Periciales, se desplazaron a esa residencia para realizar una inspección ocular, en un intento por obtener huellas o indicios de los autores materiales de audaz atraco.

Detectives de la Policía Ministerial acreditable, iniciaron las investigaciones pertinentes, con el fin de identificar a los ladrones que obtuvieron un botin de más un millón de pesos.

Asimismo revisan los videos de los circuitos cerrados que estan establecidos en esa residencia, en un intento por identificar a los delincuentes que actuaron con toda impunidad, pues la Policía Municipal ni siquiera se entero de este temerario atraco.

Sin duda alguna las estrategias de seguridad y vigilancia implementadas por el titular de la Policía Municipal, el ex almirante Francisco Arenas Jaramillo, son pésimas y deficientes, al cual prácticamente le quedó grande ese cargo.