Situado en el Séptimo distrito de París, el Museo d’Orsay es una de las instituciones culturales más frecuentadas de la capital francesa. Lo primero que llama la atención del visitante es su fachada, pues corresponde a una antigua estación de trenes.
La arquitectura interior del museo es también parte de la atracción, pues los espacios fueron adaptados a la enorme estructura concebida para recibir a trenes y viajeros. El eje principal es la gran nave, alrededor de la cual se insertan diversas estructuras metálicas para delimitar las salas de exposición.
Este museo es uno de los más grandes espacios europeos para admirar las colecciones de arte occidental de 1848 a 1914. Entre las piezas expuestas se encuentran las pinturas de los célebres impresionistas que marcaron la historia del arte de finales del siglo XIX y principios del XX.