AcertijosPrincipal

VIENTO A FAVOR

Columna Acertijos de Gilberto Haz

*De Irene Vallejo: “Cuando le vendes un libro a alguien, no solamente le estás vendiendo doce onzas de papel, tinta y pegamento. Le estás vendiendo una vida totalmente nueva. Amor, amistad y humor y barcos que navegan en la noche. En un libro cabe todo, el cielo y la tierra, en un libro de verdad, quiero decir. ¡Repámpanos! Si en lugar de librero fuera panadero, carnicero o vendedor de escobas, la gente correría a recibirme, ansiosa por recibir mi mercancía. Y heme aquí, con mi cargamento de salvaciones eternas. Sí, salvación para sus pequeñas y atribuladas almas. Y no vea cómo cuesta que lo entiendan”.  Camelot.

Eliseo Alberto es un escritor cubano. Por desgracia fallecido en 2011. Para entender un mucho la Cuba de sus amores, había que leerlo. Era columnista semanal de un diario capitalino y uno de los mejores de esa élite de grandes escritores. Era un poco como aquel critico implacable del régimen cubano, Guillermo Cabrera Infante, quien un día dejó Cuba y nunca regresó. El autor de Tres Tristes Tigres. En ese exilio que mata y que a veces las horas del reloj enloquecen, sobre todo cuando se está tan cerca y a la vez tan lejos. O de Miami o de México. De aquellos, las famosas 90 millas donde por las noches huele a Cuba y ese aire impone nostalgia.  Cuando Castro murió, se pensó que Cuba se abriría a la libertad. Qué va, llegó el hermano y este se jubiló y dejó a otro émulo de dictadorzuelo con el mismo pensamiento y la misma ideología, Miguel Díaz-Canel. O sea, cambiaron para seguir igual. Quienes hemos estado en La Habana comprendemos el amor de México y Cuba, como rezan sus cantores, lo mismo Beny Moré que Celia Cruz y los grandes soneros. ‘No hay que olvidar que México y la Habana son dos ciudades que son como hermanas, para reír y cantar”. Hay tantas historias que se cuentan de pescadores que en los botes arriesgaron la vida para buscar la libertad. Esa libertad de la que no gozan, aunque sean brillantes en los deportes y en la medicina muy limitada y en los cantos soneros. Algún día vendrá un nuevo amanecer para Cuba.  

ESE TEMA DE ELISEO

Toqué el tema de Eliseo Alberto porque me hice de un libro suyo, Viento a favor, las crónicas periodistas con que nos deleitó antes de morir ‘rajado por la mitad’, como solía decir de él mismo al compartir las dos nacionalidades: cubano y mexicano. Que eso debe ser picante y sabroso. Compren el libro cuando puedan y deléitense, como lo hago ahora mismo, con historias del exilio, el cómo deslumbraron al mundo aquellos genios de la Tremenda Corte, la radionovela más exitosa de habla hispana, que aún resuenan Nananina y Rudecindo Caldeiro y Escobiña y José Candelario Tres Patines. Cuenta Eliseo: “No hay taxista o mesero de restaurante o enfermera o vendedor de tamales o tragafuegos o policía de tránsito que, al detectar ni acento habanero, no intente imitar las voces de esos queridos personajes, sólo conocidos por las muy frecuentes emisiones radiales de La Tremenda Corte. Siempre sentencian: ¡A la reja!”. Igual nos ocurre a los mexicanos con Chespirito.

Amigo de Gabriel García Márquez, amistad que se perdió por el barbudo Fidel, hijo del poeta Eliseo Diego, fallecido en julio de 2011 en hospital mexicano por una operación de trasplante de riñón, Eliseo pasa a formar parte de los grandes novelistas cubanos, de los inmortales, de aquellos que no regresaron vivos a su tierra, pero que sus cenizas se esparcieron por ese suelo amado llamado Cuba. Buen libro.  

Nueva Orden de Aprehensión Contra Ex Regidor de Córdoba

Anterior

Dos centrales termosolares para México en BCS: Claudia Sheinbaum

Siguiente

Te puede interesar

Más en Acertijos