Veracruz, Ver.- Socorro Barrientos Martínez, luchadora social y esposa de don Roberto Gómez Silveira, quien falleciera en la Clínica Gifyt cuando se suspendió su hemodiálisis por falta de energía eléctrica, pidió al IMSS que les rescinda el contrato por pésimo servicio.
Todo inició el pasado sábado a las 10:30 horas, cuando don Roberto Gómez Silveira acudió a la Clínica Gifyt ubicada en “Plaza Tecno” de la avenida Circunvalación, para recibir el servicio de hemodiálisis que el IMSS decidió subrogar a esta empresa, que no cuenta con las mínimas condiciones de higiene y seguridad.
El servicio de energía eléctrica se suspendió, las máquinas comenzaron a emitir alarmas y varios pacientes se sintieron mal, pero don Roberto falleció atendido en el piso luego de que su servicio no se restableció por falta de una planta de energía alterna, condición mínima que debió cumplir la Clínica Gifyt, pero que funcionarios del IMSS tampoco supervisaron y la empresa privada sigue dando el servicio.
Con una vida dedicada al altruismo, socorro Barrientos Martínez explicó que la empresa funciona en pésimas condiciones, se inunda cuando llueve y pacientes y familiares les llega el agua a los tobillos, sigue sin tener planta de energía eléctrica y no hay clima suficiente para soportar calores de más de 50 grados.
Ante el altar fúnebre donde se rezan los rosarios a su esposo don Roberto Gómez Oliveira, en su domicilio de la calle Isabel Carreón 182 del fraccionamiento Villa Rica, al norte de la ciudad de Veracruz, Socorro Barrientos narró los hechos y acusó que “en plena Cuarta Transformación aún hay funcionarios del IMSS que otorgan concesiones para beneficiar a amigos, a los que se les da a ganar mucho dinero sin importar las condiciones humanas de los derechohabientes.
Advirtió que ya solicitaron una audiencia con el Director del IMSS Zoé Robledo, para que tome cartas en el asunto, por qué el Delegado del Instituto en la zona Veracruz Norte Candelario Pérez Alvarado, ha permitido que esa empresa opere con total impunidad.
Aseguró que ya se tienen firmas de varios derechohabientes afectados a los que no se les ha querido escuchar, por lo que en breve procederían contra Clínica Gifyt.