Escribió al menos tres obras maestras: La isla del tesoro, La flecha negra y El extraño caso del doctor Jekyll y Mr. Hyde. En dos de ellas creó personajes que pasaron a la galería de arquetipos de la literatura europea: Long John Silver, el pirata en cuyos tenebrosos planes hay siempre una gota de humanidad que termina ganándose el corazón de los lectores; y el doctor Jekyll, el sabio que vive al margen de todo y que cae en la tentación fáustica de experimentar las sensaciones más peligrosas y para ello crea un otro yo sin barreras emocionales o morales. Entre sus novelas destacan, David Balfour y Weirde (1886) El señor de Ballantree (1889). La inconclusa Weir of Herminston (1896), está considerada como su obra maestra, pues los fragmentos que se conservan contienen algunos de los más bellos pasajes que escribió.
Demostró ser un gran ensayista en Virginius pipuerisque (1881), Estudios familiares de hombres y libros (1882) y Memorias y retratos (1887). También fueron bien recibidos por la crítica sus libros de viajes autobiográficos, como La casa solitaria (1883), en el que contó sus impresiones sobre su estancia en un campamento minero en California, A través de las llanuras (1892) e Islas del sur (1896).
Algunos de sus mejores poemas están recogidos en el volumen Jardín de versos para niños (1885). Entre los demás libros de poemas que publicó destaca De vuelta al mar (1887). Narraciones maravillosas (1882) y El diablo de la botella y otros cuentos (1893) son colecciones de cuentos.
Robert Louis Stevenson fue un novelista, cuentista, poeta y ensayista británico nacido en Edimburgo, Escocia el 13 de noviembre de 1850 y fallecido en Vailima, Samoa el 3 de diciembre de 1894. Es conocido, además de autor de historias fantásticas y de aventuras más clásicas de la literatura y de la novela histórica, en la tradición del también escocés Walter Scott.
Robert Louis Stevenson fue un escritor que vivió durante la era victoriana, y en sus obras se podía observar un estilo de escritura que mezclaba la poesía y prosa. Aunque el tono del estilo de escritura de Stevenson variaba dependiendo de su obra, los elementos técnicos siempre seguían un determinado patrón. Las principales influencias literarias de Stevenson fueron Edgar Allan Poe, William Shakespeare, Jonathan Swift y Daniel Defoe, entre otros2.
En cuanto a su estilo literario, Stevenson adoptó el estilo gótico y enfoque en lo macabro y lo sobrenatural de Edgar Allan Poe. También se inspiró en William Shakespeare, Jonathan Swift y Daniel Defoe, entre otros. Su poética, de una naturalidad engañosa, define el estilo como la búsqueda de un patrón -la escritura literaria como “malla”- y prima la verosimilitud con que un autor logra reflejar algo profundo de la condición humana
El legado de Robert Louis Stevenson es una vasta obra que incluye crónicas de viaje, colecciones de relatos y novelas de aventuras e históricas, así como lírica y ensayos tan curiosos como Apología del ocio (1876) o Moral laica (1897). Varias de sus novelas y cuentos continúan siendo populares y algunos de estos han sido adaptados más de una vez al cine y a la televisión, principalmente del siglo XX.
Fue importante también su obra ensayística, breve pero decisiva en lo que se refiere a la estructura de la moderna novela de peripecias. Fue muy apreciado en su tiempo y siguió siéndolo después de su muerte. Tuvo influencia sobre autores como Joseph Conrad, Graham Greene, G. K. Chesterton, H. G. Wells, Adolfo Bioy Casares y Jorge Luis Borges.
Desde su infancia sintió inclinación por la literatura. Fue su niñera la que le inculcó la afición por la lectura contándole historias mientras permanecía en cama a causa de su continua enfermedad. Influido por la narrativa de Walter Scott, muchas de sus historias están ambientadas en la Edad Media, aunque tal vez sea el Pacífico el espacio literario que explorase con mayor fruición. Enfermo de tuberculosis, se vio obligado a viajar continuamente en busca de climas apropiados a su delicado estado de salud.
Sus primeros escritos publicados son descripciones de algunos de estos viajes. Así, Viaje tierra adentro (1878) cuenta un recorrido en canoa a través de Francia y Bélgica que había realizado en 1876, y Viajes en burro por las Cevannes (1879) los avatares de un viaje a pie por las montañas del sur de Francia, en 1878.
Uno de sus viajes posteriores le llevó, en un barco de emigrantes, a California (1879-1880), donde, en 1880, contrajo matrimonio con la divorciada estadounidense Fanny Osbourne. Otro de ellos consistió en un crucero de placer por el sur del Pacífico (1889) hasta las islas Samoa, donde él y su esposa permanecieron hasta 1894, en un último esfuerzo por recuperar la salud del escritor.
Fue una celebridad literaria en vida, y sus historias, desde las de aventuras hasta las novelas fantásticas, entretuvieron a jóvenes y no tan jóvenes de generación en generación. Por algunos críticos fue visto durante gran parte del siglo XX como un escritor de segunda clase siendo relegado a la literatura infantil y al género de terror.
Sin duda, otro gran tesoro es gozar la riqueza de la pluma de Stevenson que se puede conseguir en leer sus libros que se pueden descargar de la red.
Algún día nos amamos.
Air Of Diabelli’s, Robert Louis Stevenson (1850-1894)
Entre la espesura de bayas y las islas de juncos, como a través de un mundo que sólo fuera cielo, oh firmamento invertido, la barca de nuestro amor se deslizaba. Brillantes como el día eran tus ojos, radiante fluía la corriente y era radiante el vasto y eterno cielo.
Cuando murió la gloria en el dorado crepúsculo, resplandeciente ascendió la luna, y llenos de flores al hogar regresamos. Radiantes fueron tus ojos esa noche, habíamos vivido, oh amor mío, habíamos amado.
Ahora el hielo envuelve nuestro río, con su blancura cubre la nieve nuestra isla, y junto a la lumbre invernal Joan y Darby dormitan y sueñan. Sin embargo, en el sueño, fluye el río y la barca del amor aún se desliza.
Escucha el sonido del remo al cortar sus aguas. Y en las tardes de invierno cuando la fantasía sueña en el crepitar de la chimenea, en sus oídos de viejos enamorados el río de su amor canta en los juncos.
Oh amor mío, amemos el pasado pues algún día fuimos felices, y algún día nos amamos.
Robert Louis Stevenson (1850-1894)